El 27 de enero se realizó el Summit Empresarial Perspectivas del Mrerado HVAC en el 2023. El evento, organizado por Expofrío Perú, congregó a un selecto grupo de empresarios de la industria del frío. Una de las ponencias fue la presentada por el especialista Pedro Temoche, la que reproducimos a continuación para información de nuestros lectores.
Ing. Pedro Temoche. Gerente División HVAC en Ascensores S.A.
Gracias por compartir con nosotros esta reunión en esta mañana. Aquí me siento un poco en familia entre mis grandes amigos, algunos rivales de mercado también. Nosotros tenemos de alguna manera la obligación de atender el requerimiento que tiene nuestro país de tener una industria que esté por encima del estándar de cumplimiento de sus expectativas de profesionalización y de formalización de todo el sector del Hvac/r. En este sentido, me han invitado a presentar una ponencia sobre cómo se comportará nuestro mercado en este año y el próximo.
Un poco para esbozar cuál es la perspectiva y la sensación y proyección que podemos esbozar, debemos partir de cómo se mueve nuestro segmento. Nosotros pertenecemos al sector construcción, donde nos desenvolvemos nosotros es a nivel de los proyectos de gran envergadura. El BCR hizo una proyección de crecimiento de la construcción de 3.5% para el año pasado, sin embargo, en nuestro segmento, hemos visto que los proyectos no se han concretado. ¿Y por qué? En inversión pública se han ido concretando algunos proyectos, en hospitales, por ejemplo. Pero si vemos otros indicadores, como cemento, vemos que éste ha decrecido. En cuanto a centros comerciales, entre el 2013 y el 2015 hemos tenido más de 20 proyectos. Pero este año tuvimos 3 o 4 proyecto.
Estamos viendo que el problema de la pandemia y el ruido político han traído mucha incertidumbre y pérdida de expectativas. Los proyectos que se concretaron han sido porque eran irreversibles, no podían dejarse de hacer, como por ejemplo el Mall Ventura de San Juan de Lurigancho, Plaza Center Rex, Shopping Center La Molina. Pero entre manos hay más de 15 proyectos pendientes que deben ejecutarse, y pueden hacerlo, de este año al 2025. La situación política es la que los ha puesto en compás de espera. Igual en el sector de construcción de Edificios Premium de oficinas; por ejemplo, Inversiones Centenario tiene varios proyectos interesantes, pero ha decidido esperar dos años.
No veo una solución al problema político en estos momentos, aunque sí es posible encontrar un camino, una dirección hacia donde ir, y los proyectos luego van a salir, uno tras otro. Por eso lo mejor es estar preparado para ello, mirar para adentro y reconvertirnos. Yo creo que el 2023 va a ser parecido al 2022, por lo menos el primer semestre. Dicho de otra manera, varios proyectos que se estrenaron el año pasado se van a dar este 2023, que son 4 o 5 proyectos interesantes. Los demás dependerá de la salida que se encuentre al actual entrampamiento.
Entonces, lo que vemos es que la mayoría de los proyectos están embalsados.
¿Qué hacemos?
Ante esto, lo mejor que podemos hacer es prepararnos para cuando venga el desembalse. En un mercado del Hvac/r con pocos proyectos se configura una situación donde la oferta y la demanda se desequilibran: pocas constructoras grandes y muchas contratistas de aire acondicionado y también muchos fabricantes. Esto hará que el mercado sea de precios, donde la calidad, la eficiencia y valor agregado no van a tener mucho espacio.
Pero nosotros, que estamos en este mercado, tenemos el desafío de empujar a que los proyectos se realicen encima del umbral mínimo de los estándares de calidad. Como suelo decir, si se tata de vender una caja es suficiente una página web. Pero otra cosa es si nos enfocamos en las soluciones que podemos brindar a los clientes e inversionistas, entonces sí podemos contribuir al desarrollo de nuestro segmento.
En algunos de los proyectos que se han concretado se han mirado solo los precios, lo que de alguna manera esto llevará a pagar el precio más alto. Vemos proyectos que se dan en condiciones subestándar, a pesar que entre nosotros hay un gran conocimiento y dominio; pero no se llegan a plasmar.
Entonces, una vez que la situación política se aclare un poco, los proyectos van a venir. No es la primera vez que sucede esto. Varias veces he visto que, cuando se piensa que no hay salida, de pronto la situación se revierte y aparecen los proyectos. Por eso me parece que vale la pena ser optimistas y prepararnos, porque en el momento que menos nos imaginamos la situación va a cambiar. Tuve un desayudo con dos grandes inversionistas que no veían nada de lo que sucede, se proyectaban mucho, parecía que hablaban de otro país. Entonces, podemos tener a la vuelta de la esquina un posible buen escenario. Por eso, a donde debemos enfocarnos es a colocar todos nuestros esfuerzos a prepararnos para lo que va a venir, que es el desembalse de los proyectos que vienen postergados incluso desde antes de la pandemia. Además, para empujarlos proponiendo soluciones integrales.
Tenemos que ver los proyectos de manera integral. Por ejemplo, un proyecto de un centro hospitalario que opera una planta de agua helada con una torre de enfriamiento, buscando una mejor eficiencia. Un centro hospitalario donde hay una multidisciplina médica y que se encuentra bajo el riesgo de muchas bacterias, tendríamos que ofrecer una solución integral y libre de exposición de riesgos a todo el personal. Si no se hace esto y utilizamos una receta como las que tenemos en Hvac con diseños novedosos, habrá problemas. De alguna forma contribuimos y no terminamos de aplicar lo que sabemos, y que se hace en todo el mundo, incluso nuestros vecinos. No es un tema únicamente de lo que se puede hacer. Creo que todos nosotros lo que tenemos en nuestro segmento.
La oferta es más grande que la demanda. Los proyectos grandes están en pocas constructoras. Tenemos potencial de crecimiento. Antes me preguntaba algunas veces: ¿yo podría hacer todas las obras? Siento que sí podría: tengo una estructura que podría hacerla crecer, y cubrir todo el mercado. Pero otros también podrían hacerlo. Entonces tenemos un potencial. Pero es una oferta grande frente a tres o cuatro constructoras grandes que tienen las obras. ¿Y cómo podríamos superar esta vorágine o tendencia que parece imposible de revertir? Con tecnología y con valor agregado. Ofreciendo una solución.
¿Qué ha pasado? Ahora los clientes conocen y saben más que antes, ahora ellos mismos compran sus equipos, sus chillers, saben más y piden más. Los inversionistas no entendían eso antes pero ahora han crecido las gerencias de proyectos. Lo mismo en cuanto a las normas que ya las conocen. Ahora ya podemos conversar con ellos directamente. El mercado viene cambiando muy rápidamente; en realidad lo único constante es el cambio. Yo hago una revisión de los proyectos más exitosos de los dos últimos años y encuentro que la fórmula para haber generado esos negocios ha sido por intereses. Pero si seguimos la misma fórmula vamos a estar un paso atrás. Tenemos entonces que enfocarnos en las soluciones.
Entonces en estos momentos difíciles, de incertidumbre, es el momento de definir esta nueva forma de hacer las cosas. No tenemos una bola de cristal para predecir lo que vendrá. Pero mirando para atrás, ya podemos entender la tendencia, y todos los proyectos que se han postergado, edificios, centros comerciales se van a dar. Entonces entre el 2023, 24 y 25 vamos a mirar para atrás y veremos si se dieron todos estos proyectos. El último semestre de este año vamos a tener los primeros proyectos. Hay algunos síntomas de que se van a producir, pero todavía no se termina de desarrollar o desencadenar. Aprovechemos el tiempo y redefinirnos como grandes jugadores de soluciones, en lugar de enfocarnos solo en vender.
La salida está en esto que estamos hablando. Tenemos bastante potencial. Si algo tenemos es un mercado joven. No estamos como otros mercados que ya están logrados y estructurados. Vemos que hay mucho por hacer. Así que los invito a reflexionar sobre estas cuestiones, a conversar y a intercambiar ideas, porque después de todo está en nuestras manos, nosotros somos actores, y lo que hacemos influye.
Por ejemplo, nos ha sucedido el año pasado, que hemos tenido obras grandes que no imaginamos que ni siquiera se dieran los concursos, pero de una forma de llegar a entender la necesidad y salirnos de la línea convencional y concretarlo. Creo que si nos enfocamos en esto sí podemos contribuir a una reactivación. Los proyectos están en la congeladora esperando. Los inversionistas de todas maneras lo van a hacer tan pronto se den las condiciones.
¿Y cómo podemos contribuir a eso? Cruzando el umbral del estándar y generar condiciones para que las inversiones puedan concretarse de manera óptima, y no como hemos visto algunos proyectos que en el afán de reducir costos terminan siendo inversiones infelices que no consiguen el objetivo de ser rentable y que les permita recuperar su inversión.
Nuestro aporte debe ser entregar al mercado proyectos de alto nivel de ingeniería y de concepción de negocio como algo de largo plazo, un proyecto tiene 25 años de vida, al menos. Si solo pensamos en el momento de la inauguración no vamos a salir de la mediocridad, que no cruzan el umbral del estándar mínimo. Lo que estoy diciendo es algo del día a día. ¿Cuál es la mejor solución para un proyecto a lo largo de su vida útil? Estamos esperando que los proyectos se concreten. Pero podríamos estar empujando a que se concreten haciendo estos proyectos viables.