Empresa danesa realiza un análisis de los problemas más comunes que presentan los sistemas de distribución de aire y propone alternativa de conductos textiles.
Según FabricAir, los sistemas de distribución de aire son esenciales para cada edificio. Sin embargo, antes y después de la instalación, pueden surgir muchas preguntas o problemas y cada paso debe pensarse hasta el último detalle.
Problemas con las soluciones convencionales
El portal web de la empresa indica que los conductos metálicos convencionales son pesados y ocupan mucho espacio. “Algunos sistemas pueden requerir muchos conductos de metal, lo que requeriría el transporte en camiones grandes. Además, existe una alta probabilidad de que los conductos no se instalen de inmediato y deban almacenarse, muy probablemente en el exterior debido al espacio limitado”.
En tal sentido, el almacenamiento al aire libre podría afectar la limpieza de los conductos y, si los conductos no se limpian correctamente, la suciedad y los desechos acumulados se trasladarían a las áreas ya limpias o preparadas.
“El mantenimiento de los conductos metálicos también es muy complejo. Tanto externa como internamente, los conductos pueden acumular suciedad y bacterias, y algunas empresas deben mantener los sistemas de distribución de aire debido a estrictos requisitos de higiene”.
Más ligero, más rápido y más simple: “todo está en la tela”
Teniendo en cuenta los problemas asociados con el transporte, la instalación y el mantenimiento de conductos de metal, la marca danesa asegura que los sistemas de dispersión de aire de tela pueden ser una alternativa eficaz y, en la mayoría de los casos, superior.
La empresa indica que una de las mayores ventajas de los conductos textiles es su ligereza y facilidad de embalaje. “A diferencia del metal, los conductos de tela se pueden transportar con mucha facilidad ya que se empaquetan densamente en cajas en unas pocas paletas”.
Asimismo, dichos conductos de tela son fáciles de almacenar hasta el día de la instalación. La caja cerrada garantiza que los conductos permanezcan limpios y sin daños hasta que se instalen y no incurrirán en problemas de mantenimiento adicionales al traer suciedad y escombros a las instalaciones ocupadas por personas o maquinaria delicada.
Mantenimiento
Ahora bien, frente al mantenimiento la compañía explicó que lo requieren, “sin embargo, es significativamente más fácil. Una de las formas más sencillas es comprar conductos de tela de repuesto que se pueden reemplazar y el sistema puede estar en funcionamiento con menos tiempo de inactividad y menos efecto en la productividad”.
En caso de que no se cuente con conductos de repuesto, el sistema se puede desinstalar, lavar los conductos en una lavadora comercial y volver a instalar. “No hay necesidad de empresas especializadas ni costosos mantenimientos”.
En conclusión, para FabricAir los sistemas de distribución de aire basados en telas pueden ahorrar no solo mucho tiempo, sino también dinero y recursos. Es decir, son una “alternativa eficiente y superior a los sistemas HVAC metálicos convencionales que se incorporan a un número creciente de aplicaciones con resultados superiores”.