Si bien los televisores sigue representando el 75% del negocio, en el primer año de ingreso a línea blanca se espera sumar nuevas categorías que impulsen la oferta.
En el 2016, Hisense entró al Perú con un distribuidor para competir en el mercado de televisores. Sin embargo, la tecnológica china decidió tomar las riendas de la operación local con una filial directa en julio del 2021 y ahora mira más categorías e inversiones propias. Así, la marca ya ingresó este año a línea blanca.
«Los televisores son el 75% del negocio. En refrigeración, cerraremos el año con 1% de share en un mercado de aproximadamente 600,000 unidades y que bordearía los S/1,000 millones, con una caída de 10%», comentó Gonzalo Falcón, gerente general de la marca a Gestión, citando datos de GfK.
Para el 2023, confió en que la categoría de refrigeradoras mantenga su nivel de ventas y seguir ganando participación en la misma. Además, planea continuar ampliando el portafolio local, entrando a otro rubro de la línea blanca. «En refrigeración, esperamos cerrar el 2023 con aproximadamente 5% de market share y tener algunas pinceladas en la categoría de lavado, con algunos negocios con algunos clientes importantes.
