En el marco del Día Mundial de la Calidad del Aire Interior, Systemair comparte un artículo donde habla de la importancia de este factor en sectores como retail.
A través de sus redes sociales, Systemair España comparte un artículo donde conversó con el periódico El Mundo. En el marco del Día Mundial de la Calidad del Aire Interior, la empresa destacó la importancia de la ventilación en un ambiente interior, como los centros comerciales, para volverlo saludable y confortable.
Sistemas de ventilación en los malls
La ventilación con recuperación de calor es perfecta. El 75% de los europeos y el 54% de la población mundial vive en ciudades en las que la calidad del aire no es siempre la más óptima. Gran parte de las personas son conscientes de la contaminación de los coches o fábricas, pero pocas reflexionan sobre el aire en estancias y lugares cerrados.
Systemair señala que la mayoría de gente pasa el 90% de su tiempo en espacios cerrados y, en muchos casos, aglomerados, tal y como vamos a ver en las próximas semanas cuando las compras navideñas se disparen.
Además, la contaminación del aire interior, en gran medida, está marcada por: la concentración de CO2 que se genera en entornos con mucha gente, hongos, baterías, virus o productos tóxicos. Está probado que la mala calidad del aire es perjudicial para la salud. Por ejemplo, puede tener un impacto directo en la función pulmonar, pero también en otros órganos vitales.
Cuanto más pobre sea la calidad del aire que respira una persona, mayor riesgo tendrá de contraer enfermedades. Así, el debate sobre el aire limpio ya no solo está relacionado con el trabajo en fábricas, también forma parte de una vida saludable en todos los ámbitos.
¿Cuántos litros de aire inhala una persona?
Se calcula que, durante el día, una persona inhala de 8.640 a 2.960 litros de aire. Permitir que sustancias nocivas lleguen a los pulmones o al torrente sanguíneo es fatal para la salud. Y, por consecuente, para el día a día de los ciudadanos en todas sus facetas. De hecho, la pérdida de rendimiento laboral causada por una mala calidad del aire, por ejemplo, se estima en un 5%. La mala calidad del aire hace que las personas se concentren peor.
La solución: ventilación forzada
El aire limpio mejora el sueño, el rendimiento académico o laboral y, según una investigación de la Universidad de Harvard, también mejora la función cognitiva. El aire limpio, por lo tanto, es vital para una vida saludable. En este sentido, cada vez más personas instalan sistemas de ventilación en casas particulares, pero también están muy presentes en oficinas, colegios, hoteles o tiendas donde se acumulan muchas personas a la vez.
“Abrir únicamente las ventanas – ventilación natural- no introduce un flujo de aire tan grande como para eliminar partículas nocivas, virus o el CO2 que se genera en los interiores”, recuerda Rafael Moral, Managing Director de Systemair España. Una de las soluciones a este problema es recurrir a la ventilación forzada con recuperación de calor que no solo mejora la ventilación, también reduce el consumo energético.
En la práctica, la forma más eficiente en términos de energía para que haya una ventilación adecuada, es precisamente la ventilación mecánica controlada. Estos sistemas pueden intercambiar el aire interior viciado con el aire exterior de manera totalmente controlada y automatizada.
Las unidades de tratamiento de aire o climatizadores con recuperador de calor, extrae el calor del aire viciado que se ha sacado del edificio y lo utiliza para precalentar el aire fresco de la impulsión que se introduce en el espacio interior. Esto contribuye a reducir la energía necesaria para la calefacción o refrigeración. Tanto en los hogares como en las empresas esto se traduce en ahorros significativos.
Un ejemplo…
Fuera hace 40 grados y dentro de un espacio el aire está a 25 grados. La máquina es capaz de guardar el frescor del interior y mezclarlo con el aire de la calle. Así el aire exterior entraría a la máquina con una temperatura de, aproximadamente, 35 grados y la enfriadora necesitaría menos energía para hacerlo llegar a los 25 grados. Con esto se consigue una eficiencia de entorno al 80%, dependiendo del tipo de recuperador.
Y es que estas unidades de tratamiento de aire tienen un alto consumo energético, por lo que es indispensable que se utilicen de la forma más sostenible posible. Finalmente, los climatizadores se equipan con de aire para garantizar que el aire suministrado esté libre de contaminación por partículas.
Es importante confiar en marcas con amplia experiencia en la mejora de la calidad del aire interior. Este es el caso de Systemair, una compañía que lleva 50 años mejorando la salud de las personas gracias a productos de ventilación, tratamiento de aire y calefacción.
Fuente: El Mundo