UniSA y Glaciem Cooling desarrollan un sistema de refrigeración eficiente que reduce el consumo energético y emisiones en un 19% y 37% respectivamente.
Los investigadores de la Universidad de Australia del Sur (UniSA) han establecido una colaboración con la industria para desarrollar un sistema de refrigeración innovador y energéticamente eficiente que promete transformar la refrigeración en supermercados, hospitales, mataderos y otras instalaciones. Este sistema de refrigeración de dióxido de carbono (DP-CO2) por evaporación indirecta, también conocido como punto de rocío, ha sido desarrollado conjuntamente por UniSA y Glaciem Cooling Technologies.
Además, el sistema ha sido instalado y probado en el nuevo supermercado Coles en Norwood, Australia del Sur, bajo el marco del programa de investigación RACE for 2030 CRC. Los resultados preliminares son prometedores, mostrando una reducción del 19% en el consumo anual de energía de refrigeración y una disminución del 37% en la demanda máxima de electricidad. Estas mejoras no solo reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también disminuyen significativamente los costos operativos.
En ese sentido, el Dr. Tim Lau, investigador de energía sostenible de UniSA y principal investigador del proyecto, explica que la calefacción, ventilación, aire acondicionado y refrigeración pueden representar hasta el 70% del uso de electricidad de los clientes y el 24% del consumo de electricidad en Australia. “El sistema utiliza enfriadores de punto de rocío para enfriar previamente el aire ambiente, permitiendo un funcionamiento eficiente incluso en climas cálidos que superan los 40 grados Celsius, lo que reduce el consumo de energía en más de un tercio durante los meses de verano”, menciona el Dr. Lau.
Asimismo, se ha desarrollado un modelo computacional para evaluar el potencial del sistema en varios sectores, incluidos hospitales, plantas de procesamiento de carne, cámaras frigoríficas y acuarios. Los beneficios más significativos se esperan en climas cálidos y secos como el centro de Australia. “Este proyecto allana el camino para una refrigeración comercial más ecológica y rentable, no solo en Australia sino en todo el mundo”, concluye el Dr. Lau. Si se replican los prometedores resultados, Coles y otras empresas podrían adoptar el nuevo sistema en sus instalaciones, reduciendo significativamente el consumo de electricidad y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Fuente: Universidad de Australia del Sur (UniSA)